El presente libro efectúa un análisis de lo acontecido durante un periodo denso en significaciones y consecuencias para la sociedad valenciana y sus instituciones.
La larga dictadura del general Franco proscribió cualquier actividad política que se plantease más allá de lo que vino en llamarse, a partir de 1967, el Movimiento Nacional. Para los hombres del régimen, mover equivalía a cambiar limitadamente. Por su parte, la oposición actuó mayoritariamente desde las coordenadas del marxismo en cualquiera de sus versiones. Aquéllos fueron años en Occidente de efervescencia y transformación, y la política valenciana oficial, tolerada o perseguida fue a la vez sujeto y objeto de pretensiones dispares, todas ellas atentas al incierto futuro español. Por descontado, las grandes fuerzas en lid incorporaron ciertas temáticas locales a sus estrategias y argumentarios, y, si convino, no dudaron en excitarlas después se supo que hasta el desencanto y la deflación colectivas.
Sólo el análisis del detalle y de las sinuosidades de aquel proceso puede proporcionar una mirada lúcida y serena de esta etapa inicial de las instituciones que conforman la Generalitat Valenciana. Cuatro décadas después de la promulgación de la Ley Orgánica, 5/1982, de 1 de julio, de estatuto de autonomía de la Comunidad Valenciana, tal vez ha llegado el momento de atemperar ciertos apriorismos y de afinar en la comprensión de lo que sucedió.