El directivo enfermero debe saber planificar para su equipo unas metas realistas y ambiciosas, ha de organizar sus recursos, tanto humanos como materiales, para optimizar su rendimiento, deberá tomar decisiones acertadas, y por último, tendrá que llevar a cabo un control periódico de los resultados para encauzar las medidas correctoras necesarias. Pero todo este proceso de dirigir no se podría llevar a cabo, si no se realizar previamente una adecuada planificación, incluyendo todas las actividades necesarias realizadas por el profesional de enfermería.