En la actualidad, la humanidad es azotada por una serie de calamidades que surgen de las industrias alimentarias. Si antes el hombre navegaba ignorante con enfermedades como el escorbuto, hoy en día estamos a bordo del barco de las grasas: al asfixiar nuestra sangre, nos estamos ahogando poco a poco. Paradójicamente, los ácidos grasos esenciales (buenos) encabezan la lista de los nutrientes de los que más carecemos. Cuando nuestros tejidos padecen deficiencia de buenas grasas, la salud se deteriora, nos atacan las enfermedades degenerativas y el estado de ánimo se aflige.
En este libro se aborda un tema crítico para la salud, el cual se expone de manera clara y sencilla. Se desmitifican muchos falsos conceptos sobre las grasas, cuyo sabio consumo es una de las mejores herramientas para afrontar cualquier enfermedad, mitigar el envejecimiento, encender la felicidad y alegrar el corazón.